just another rainbow -entrevista 2024

 

Cuando Liam Gallagher escuchó por primera vez las canciones que John Squire había escrito para su nuevo álbum colaborativo, tuvo dos pensamientos: que "rockeaban" y que instintivamente sabía cómo cantarlas. Después de todo, ha estado cantando canciones de Squire desde que era un adolescente.

“Tienes que recordar que soy un gran fan de Stone Roses”, anuncia Liam Gallagher desde el otro lado de la mesa en un estudio en Kentish Town, al norte de Londres. "Me metieron en una banda, así que conozco los ritmos. No es como si estuviera cantando a Trent Reznor del put. Nine Inch Nails, ¿sabes a qué me refiero? No digo que fuera fácil. Sólo hago que parezca fácil. ".

Lanzado con el reciente sencillo de tintes psicodélicos  -Just Another Rainbow-, ésto es una unión entre dos de los miembros más famosos de la escena musical de Manchester: John Squire, el todavía talentoso guitarrista de Stone Roses, y Liam Gallagher, el líder de Oasis cuya arrogancia definió el optimismo y el hedonismo de los años 90.  Just Another Rainbow subió al número 1 en la lista de mitad de semana y podría permanecer en la cima hoy Enero 2024.

 

La colaboración homónima ganó fuerza tras la participación del guitarrista en los conciertos masivos que hizo Liam Gallagher en Knebworth 2022. Emocionado al saber que Squire estaba componiendo nuevamente, el cantante quiso participar ("Cuando el rock'n'roll llama, debes tomar el teléfono"), pero bajo Dos condiciones: el material tenía que ser rico en guitarras y Squire tendría que escribir las letras. No se han configurado otros parámetros; No hubo discusiones estratégicas alrededor de la mesa de la discográfica. "Así es como debería ser", dice Liam Gallagher. "Convocar a gente a reuniones es un put. asunto inmobiliario, ¿no?" Él y Squire habían colaborado anteriormente una vez en -Love Me and Leave Me-, una canción escrita para la banda de Squire posterior a Stone Roses, -Seahorses-, pero los recuerdos de ambas partes son confusos en cuanto a cómo surgió esto.

 Los mensajes de texto volaban de un lado a otro; Squire envió demostraciones de sus trabajos en progreso, mientras Liam Gallagher lo acribillaba con videos de YouTube de otros artistas, incluidos  Sex Pistols, Jimi Hendrix, Faces y  Bee Gees. “Lo envió poco después de que yo le enviara [mi primer demo] Love You Forever, que canté en un registro muy alto, fuera de mi alcance”, dice Squire (con quien habló con Liam en una sala contigua). Cuando apareció una canción de Bee Gees en respuesta, Squire pensó que Gallagher estaba "burlándose de él; la sensación era que esto no me importa, necesitamos repensarlo". Resulta que nunca había recibido el demo de Squire y esos falsetes de Gibb le habían sido enviados con sinceridad, al igual que los otros videos, como una guía de cómo esperaba que sonara el álbum.

 

Después de trabajar de forma remota durante unos meses, en mayo de 2023 Gallagher viajó al estudio de la casa de Squire en Macclesfield para grabar algunas voces iniciales. Cuatro meses después fueron a Los Ángeles y grabaron 10 temas en tres semanas. Greg Kurstin produjo y tocó el bajo y el piano; él y Squire se unieron a través de Crosby, Stills y Déjà Vu de Nash & Young , Paul McCartney y el baterista de Jimi Hendrix Experience, Mitch Mitchell. Joey Waronker (que ha trabajado con Beck, REM y Roger Waters) tocaba la batería. Querían evitar hacer un álbum donde la musicalidad sonara "mecánica". “La perfección es subjetiva, ¿no?”, sugiere el escudero. Añade que a menudo le gusta "algo que está un poco fuera de tiempo, un poco descuidado. Hay mucha percusión en los discos de los Stones y los Beatles que está fuera de lugar y, sin embargo, es perfecta".

 

El resultado es un disco de blues psicodélico notablemente animado y alegre, en el que las líneas de guitarra de Squire brotan alegremente y la voz de Gallagher a menudo se eleva por encima de su habitual gruñido. En The Stone Roses Squire la interpretación fue duradera, explorando los grandes espacios abiertos por los ritmos de la banda; aquí es más parco y decidido, dejando que las canciones dicten todo. Su juego parece rejuvenecido, mientras que Gallagher ha encontrado más cómoda su forma post-Oasis. El cierre del álbum, Mother Nature's Song, una oda a la belleza de nuestro mundo natural acompañada de guitarras acústicas y, apropiadamente dado el título, slide al estilo de George Harrison, es una de las canciones más conmovedoras que cualquiera de los artistas haya grabado. La voz de Gallagher hizo que Squire se llenara de lágrimas cuando la escuchó por primera vez, algo que Squire dice que nunca ha sucedido con nada que haya escrito antes.

 

Cuando le pregunto si Gallagher tenía poder de veto sobre las letras, Squire dice que el tema nunca se mencionó, mientras que Gallagher se enoja ante la misma pregunta: “Si hubiera habido algunas travesuras extravagantes en la olla, por supuesto que se lo habría dicho. ¡Fuera! Pero recuerdo haber leído el texto y haber pensado: ¡me queda bien!".

Con una parka verde  y maldiciendo, Liam Gallagher sigue siendo él mismo de principio a fin. Mientras hablamos, a veces tengo la impresión de que la bravuconería de la juventud está dando paso a la sabiduría de la edad, para regresar a otro liamismo clásico y audaz. Dice que le gustaría dar golpes verbales a las bandas rivales, excepto que "no hay nadie alrededor", o al menos ninguno que considere digno. "Es una pena, porque ellos también lo entenderían", dice tranquilizadoramente. "Nadie quiere estar en una banda y compartir el éxito estos días. Todos son estrellas solistas de 'yo, yo, yo'..."

Aunque Gallagher ha grabado tres álbumes en solitario ( todos ellos número uno en el Reino Unido), claramente prospera como parte de un equipo. Su primer proyecto post-Oasis fue la banda Beady Eye; El cofundador de Oasis, Bonehead, ha realizado giras como miembro de su banda en vivo; y Gallagher volverán a visitar el debut de Oasis en 1994, Definely Maybe , para una gira por salas y encabezarán los festivales de Reading y Leeds este año. La intención es mantener vivo el catálogo de la banda. "No puedo permitir que Oasis se convierta en una de esas [bandas] en las que envuelves un álbum en celofán cada 10 años", dice.

​Sin embargo, en el sentido más estricto del término, Oasis ha estado en hibernación desde 2009, después de un altercado entre bastidores en el festival Rock en Seine de París, tras el cual Noel Gallagher se fue y nunca regresó. ¿Liam haría algo diferente si pudiera volver a esa noche hace casi 15 años? "Sí, les daría una paliza a ambos", se enoja, refiriéndose tanto a Noel como al manager de la banda, Marcus Russell. De repente se levanta de su asiento y camina por la habitación gesticulando. "Me arrojaron debajo del maldito autobús. Toda mi vida se vino abajo".

 

Noel siempre tuvo la intención de actuar en solitario, dice, citando como evidencia los conciertos acústicos en solitario de Noel entre giras de Oasis. "Si quieres hacer tu propia cosita porque no recibes suficiente atención, siéntete libre, hombre. Iré a Barbados y me sentaré en una playa durante seis meses, pero no desconectaré la banda". . Así es como yo lo vi." Noel, por su parte, afirmó en 2009 que dejó la banda porque "el nivel de intimidación verbal y violenta hacia mí, mi familia, mis amigos y mis compañeros de banda se volvió intolerable", y en 2021 describió el altercado de París como "sólo la gota que colmó el vaso".

Liam afirma que le señalaron con el dedo cuando el grupo se desmoronó y se culpó a su forma de beber. Se sienta y dibuja una línea recta sobre la mesa para indicar coherencia. "Ese ha sido mi comportamiento desde el primer día, y el de él también. Eso es lo que hizo de Oasis lo que eran", dice. “Yo no era diferente, pero de repente se convirtió en Ronan Keating o en algún imbécil blando, diciendo: 'No podemos soportar ese comportamiento'…” Gallagher ahora está en pleno flujo. "Mientras tanto [estos días] está de gira con el put. [ex líder de Kasabian] Tom Meighan, quien supuestamente, aparentemente, tiene..." No llega a mencionar la condena por agresión de Meighan en 2020". Sin embargo, no volverías a una banda conmigo ¡¿Porque soy un 'maldito imbécil'?! ¡Eh, relájate, hombre!"

Él llama a los cinco años posteriores a la desaparición de Oasis una "pesadilla absoluta... Estaba sentado en casa sin gerencia, sin oficina y sin nadie con quien hablar, mientras que Noel", como principal compositor y fuerza creativa de Oasis, era "todavía llega a su gran oficina administrativa con todos corriendo detrás de él, actuando inteligente e insultando a la gente. Mirando hacia atrás, en retrospectiva, puedes decir: 'Eres un niño grande' y todo eso, pero cuando has tenido todas esas cosas durante 20 años... Apenas podía atarme los zapatos, mucho menos administrar mi negocio o mi vida. Todo ese apoyo me fue quitado, mientras el pequeño Noely G todavía lo tenía todo allí". 

Y continúa: "Había 40 o 50 personas trabajando para Oasis. De repente, todos se quedaron sin trabajo. Mientras tanto, él se va con su guitarra y su esposa, divirtiéndose mucho". ¿Alguna vez has hablado de ello directamente con Noel? "NO. No hubo conversación. No lo he visto y no nos veremos. Están todos atrapados en sí mismos, todos". La diferencia, dice, es que "sé que fui humillado. Y gracias a Dios, porque eso me hizo una mejor persona. Pero él no lo es. Todavía anda pensando que es el mejor, pero ya veremos".

 

Liam Gallagher, que tuvo que recoger los pedazos, dice que formó Beady Eye como una "curita" para él y los miembros restantes del grupo. "Gem [Archer] y Andy [Bell] habían puesto su corazón y alma en Oasis y los arrojaron al contenedor de basura". Nunca tuvieron grandes objetivos en Beady Eye, añade. "Sólo estábamos tratando de mantenernos cuerdos". La banda lanzó dos álbumes antes de retirarse en 2014. La carrera en solitario de Gallagher comenzó en 2017, y esos tres exitosos álbumes culminaron con dos noches con entradas agotadas en Knebworth, sede del mayor triunfo en vivo de Oasis en 1996.

Cuando me uno a Squire en la habitación de al lado, el cambio de atmósfera es palpable. Tengo la impresión de que calcula el impacto de cada sílaba antes de dejarla entrar en la atmósfera.

Cuando subió al escenario de Knebworth junto a Gallagher en junio de 2022, era la primera vez que actuaba en vivo desde que los Roses se estrellaron en 2017.  . Sin embargo, grabar un álbum fue un paso demasiado lejos.

"Se hizo evidente que no iba a suceder", dice Squire con seriedad, con los ojos asomando detrás de su flequillo. En 2016 surgieron dos nuevas canciones, All for One y Beautiful Thing, pero para entonces "la sensación general era que nadie estaba siquiera interesado en formar parte de una banda juntos, y mucho menos en hacer un álbum".

Y así los Roses tomaron caminos separados. El cantante Ian Brown ha retomado su carrera en solitario y ha utilizado las redes sociales para difundir sus diatribas sobre la vacuna anti-Covid, mientras que Squire ha vuelto al arte visual (cocreó la portada pop art de Just Another Rainbow). "Considero que crear cualquier cosa es una parte válida de mi personalidad y mi felicidad", dice, "así que no importa cuán grande o pequeño sea, o si es visual o auditivo. Lo que me impulsa es crear".

 

La música, sin embargo, no estaba en su agenda. Y tal vez hubiera seguido así si no hubiera ocurrido un desastre en 2020. Mientras jugaba baloncesto con su hijo de nueve años, Squire tropezó y se rompió la muñeca de su mano dominante, golpeándose el pulgar. "Me dio pánico", dice. "Había dudas sobre si podríamos recuperar su pleno uso". Finalmente, la fisioterapia combinada con un riguroso régimen de práctica de guitarra lo devolvió al nivel que tenía antes.

​La lesión no sólo le obligó a volver a jugar; reavivó su deseo de hacerlo. "Todavía soy un fanático de los cambios de clave, los cambios de acordes y las letras elegidas", dice. "Si puedo lograrlo, será realmente emocionante". Cuando se le pregunta si se arrepiente de no haber publicado más música a lo largo de los años, se muestra cauteloso: "Habría un compromiso. Puede que no esté casado. Puede que no tenga tantos hijos" -tiene seis- "y puede que no haya visto ellos tanto. No siento que haya hecho un gran lío".

 

Cuando se trataba de que él y Gallagher trabajaran juntos, Squire dice que tenía "grandes esperanzas", pero su química superó sus expectativas: "Creo que a ambos nos sorprendió lo complementario que era el tono de mi guitarra con su voz y cómo funcionaban las canciones que escribí". para él." Squire se niega, sin embargo, a dejarse arrastrar por el significado de sus letras y dice: "Creo que es prerrogativa del oyente", después de componer líneas tan intrigantes como "Sé que eres feliz en tu trance suburbano / Deberías haberme jodido cuando tuviste la posibilidad" (Un día a la vez); “Este viaje de autodescubrimiento tiene mis velas encendidas” (Marte a Liverpool); y “Gracias por tus pensamientos y oraciones / Y que te jodan también” (Make It Up As You Go Along) destinado a seguir siendo un misterio.

Gallagher y Squire esperan que este sea el comienzo de una relación musical continua. Quieren hacer una gira más adelante este año y Squire insinúa que ha comenzado a trabajar en un segundo álbum. "La guitarra reacciona", dice.

 

"Si a John se le ocurre otra carga de canciones espectaculares, ellos también lo sabrán", dice Gallagher. "Squire tiene mucho más en él. La gente ve a John como un héroe de la guitarra, pero él sabe cómo escribir una maldita canción". Cuando me levanto para irme, felicito a Gallagher por su actuación y sugiero que, aunque siempre ha sido fantástico, Squire le ha dado un poco de impulso.

Una semana después, me dicen que vuelva a llamar a Gallagher. "Quería animarte con algo", dice. "¿Dijiste que John me dio un poco de 'rollo'?" Tímidamente afirmo que sí. "Sí, me molesté al pensar en eso mientras me alejaba. Pensé: 'A la mierda'.

"Siempre he sido rock y siempre he sido roll". Se detiene por un momento. "Pero, dicho esto, John me inspiró a estar en una banda. Así que tal vez él me dio el rock and roll".

Sólo otro arcoíris ya está disponible. El álbum de Liam Gallagher John Squire se lanzará ahora en la primavera europea.

Fuente: Entrevista de Greg Wetherall, de The Guardian